En el momento que los niños se ponen de pie y echan a andar, comienza un proceso de adaptación y acomodación de la musculatura que pasa por diferentes fases. Es la oportunidad perfecta para que los padres observen posibles anomalías
En el momento que los niños se ponen de pie y echan a andar, comienza un proceso de adaptación y acomodación de la musculatura que pasa por diferentes fases. Es la oportunidad perfecta para que los padres observen posibles anomalías